El tráfico de mercancías en el conjunto de las 28 autoridades portuarias de titularidad estatal sigue reduciendo su crecimiento acumulado. Entre enero y septiembre, el crecimiento se quedó en el 1,4%, hasta 369,2 millones de toneladas.
Los datos publicados por Puertos del Estado y recogidos por Anave reflejan descensos tanto en los graneles sólidos (2,0%) como líquidos (1,4%), que fueron compensados por el crecimiento de la carga general (4,9%) y, sobre todo, de la carga en contenedores (5,5%). El tráfico ro-ro, por su parte, también subió (7,7%).
El tráfico ro-ro, con el mencionado crecimiento del 7,7%, acumula 41,5 millones de toneladas. Los principales puertos acumulan el 71,2% de este tráfico, con crecimientos notables en Algeciras (11,5%), Baleares (9,5%) y Valencia (8,7%) y más modesto en Barcelona (1,8%).
En los nueve primeros meses, el comercio exterior (la suma de las importaciones y de las exportaciones) totalizó 206,8 millones de toneladas, con un ligero descenso del 0,3% (en este dato no se incluyen las taras de contenedores y cargas ro-ro).
Las importaciones descendieron un 1,2%, totalizando 140,0 millones de toneladas, que suponen el 67,7% del comercio exterior. El notable descenso en los graneles sólidos (4,9%) y el más moderado en los líquidos (0,6%), que suman el 84% de las importaciones, no se ha podido compensar con el crecimiento de la carga general (5,3%).
Las exportaciones sumaron 66,9 millones de toneladas (el 32,3% del comercio exterior), con un aumento del 1,8%, impulsadas por los graneles sólidos (15,4%), mientras la carga general aumentó solo ligeramente (0,6%) y los graneles líquidos descendieron un sensible 6,4%.
En el tráfico total de mercancías (la suma del tráfico exterior, el cabotaje y los tránsitos), el 47,7% de las mercancías movidas correspondieron a carga general, seguida de los graneles líquidos (33,7%) y, finalmente, de los graneles sólidos (18,6%). Los principales puertos españoles (Algeciras, Valencia y Barcelona) movieron 161,6 millones de toneladas, que suponen el 43,8% del total.
La carga general totalizó 176,1 millones de toneladas (+4,9%). La carga en contenedores creció un 5,5%, hasta 125,3 millones de toneladas, que suponen el 71,1% de la carga general movida, mientras que la carga convencional, con el 28,9% restante, sumó 50,8 millones de toneladas (+3,3%). Entre los principales puertos, registraron aumentos notables Algeciras (10,7%), Baleares (8,9%) y Barcelona (8,4%), ligero en Valencia (1,1%) y descensos en Bilbao (3,4%) y, sobre todo, en Las Palmas (10,3%). Estos seis puertos operaron el 84,4% de la carga general.
En los nueve primeros meses del año, los graneles líquidos descendieron un 1,4%, hasta 124,4 millones de toneladas. Este descenso viene explicado porque, a excepción de Huelva (que creció un 15,0%), todos los puertos relevantes para este tráfico registraron descensos; Barcelona (0,3%), Algeciras (0,9%), Cartagena (5,5%), Bilbao (6,1%) y Tarragona (11,6%). Menos el puerto onubense, el movimiento de graneles líquidos cayó un 5,1%. Estos cinco puertos perdiendo en conjunto cuatro millones de toneladas.
Los graneles sólidos descendieron un 2,0%, acumulando 68,7 millones de toneladas. Entre los principales puertos para esta carga solo registraron crecimiento Huelva (14,3%) y Castellón (12,1%), mientras que descendieron Ferrol (1,6%), Cartagena (2,3%), Gijón (4,6%) y Tarragona (6,2%). En conjunto, estos seis puertos movieron el 55,3% de los graneles sólidos en España.
El sector logístico está entrando en una fase de moderación tras un inicio de año muy dinámico. No se trata de una crisis, pero sí de una desaceleración clara, especialmente visible en el transporte terrestre y el empleo autónomo.
Los equipos de compras del sector manufacturero e industrial enfrentan el desafío de reducir costes sin comprometer la seguridad del suministro, a menudo con recursos limitados. Un nuevo enfoque en las compras puede ayudarles a identificar áreas de gasto que hasta ahora no se habían considerado.
Comentarios