Durante los últimos doce meses, el Grupo GLS ha invertido más de 100 millones de euros en la expansión de la red europea. “Nuestro sistema europeo se basa en redes nacionales fuertes, que garantizan una cercanía absoluta al cliente y están estrechamente interconectadas”, ha explicado Rico Back, director ejecutivo del Grupo GLS. “A fin de poder ofrecer nuestra elevada calidad incluso en picos estacionales, invertimos continuamente en toda Europa”.
La compañía ha destinado más de 100 millones de euros a la construcción, la ampliación o la modernización de delegaciones. GLS ha construido un nuevo centro logístico internacional en Eslovaquia (Zvolen). Además, la empresa de paquetería ha inaugurado siete nuevas delegaciones en la región de GLS Europe East: en Rumania (Tulcea y Târgu Jiu), Eslovenia (Slovenska Bistrica), Chequia (Klatovy y Sumperk) y en Hungría (Kazincbarcika y Budapest). También GLS Germany (Offenburg), GLS Austria (Rankweil) y GLS Poland (Radom) han puesto en funcionamiento modernas instalaciones nuevas.
En la población alemana de Neuenstein ha ampliado el centro logístico de la filial de paquetería urgente Der Kurier. En Italia ha trasladado tres delegaciones de GLS a edificios de grandes dimensiones (Pesaro, La Spezia, Imperia).
“Estas medidas han permitido a GLS reforzar sus capacidades a tiempo para afrontar las campañas de otoño y navideña. En los últimos años, el volumen de paquetes transportados a diario por el Grupo GLS a partir de octubre se situó alrededor de un 30% ciento por encima del promedio anual”, afirma Rico Back . En algunos países, el volumen incluso llegó a duplicarse justo antes de la Navidad. “Previsiblemente, el incremento estacional este año será aún más pronunciado. A fin de poder ofrecer a nuestros clientes la elevada calidad acostumbrada, durante esta fase no incorporaremos nuevos clientes a nuestro sistema”, dice Rico Back.
La distribución urbana se enfrenta a retos crecientes en eficiencia, costes y normativas. Desde la falta de infraestructura hasta la logística inversa, pasando por la electrificación o la presión regulatoria, expertos del sector comparten las claves para mejorar el modelo y avanzar hacia una última milla más alineada con las exigencias medioambientales y del consumidor.
La distribución capilar se enfrenta a retos crecientes, desde la escasez de transportistas hasta las complejidades del reparto urbano. Pascual trabaja activamente en atraer nuevo talento al sector, impulsar soluciones de última milla más sostenibles y promover modelos colaborativos y normativas más homogéneas que hagan más eficiente y responsable la logística en entornos urbanos.
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