Redacción |
viernes, 19 de diciembre de 2014, 16:47
Igor recuerda aún aquella mañana remota en la que se calzó un par de esquís y "un señor de Bilbao" le llevó a la nieve. "Empezamos a esquiar porque un señor llamado Miguel Garay vino a Durango para montar un club. Lo que aquel hombre hizo entonces con los niños de mi pueblo y de otras zonas de Vizcaya es lo que yo intento trasladar ahora al Kurdistán iraquí", reconoce a EL MUNDO Igor Urizar, orgulloso de haber abierto en la aldea de Penjwin -a unos 20 kilómetros de la frontera con Irán- la primera escuela de esquí de Irak. "Cuando llegué en 2010 el lugar me recordó aquellas salidas que hacíamos de pequeños. En los años 80 tampoco teníamos infraestructuras y solíamos subir al monte, allí donde había nieve para pisarla uno detrás de otro y dejar nuestra huella", evoca el monitor vasco.
El viaje resultó un fiasco. "No salió bien por las presiones de la policía. Un día, poco después de llegar, me invitaron amablemente a que me marchara", confiesa.
El revés, sin embargo, abrió otra puerta: la de la vecina región autónoma del Kurdistán iraquí, "una isla -dice el esquiador- en un mar de conflictos". En el invierno de 2010, Igor -pertrechado de un lote de esquís- aterrizó en Penjwin, a los pies de unas sierras que guardan todavía el espanto de las minas; la memoria de los kurdos que huían de Sadam Husein; y el rebuzno de los burros que cruzaban el contrabando.
"Al principio les pareció una cosa frívola pero, al invitarles a Navarra para que viesen el funcionamiento de la semana blanca, empezaron a darse cuenta del potencial", apunta el precursor en suelo iraquí del esquí nórdico -una modalidad que permite desplazarse por senderos y pistas forestales de inclinación moderada sin necesidad de infraestructuras-. Desde entonces, Igor ha logrado una pequeña revolución en los inviernos del Kurdistán. "Penjwin empieza a ser conocida por el esquí. Tenemos un edificio donde se almacenan los esquís y donde se organizan actividades de música, inglés e informática. Si una tarde nieva, los chicos llegan, piden prestados los esquís y practican en una explanada que hay justo detrás. Antes yo era quien tenía que organizar las clases pero ahora son ellos los que tocan a la puerta", narra entusiasmado el vizcaíno.
El éxito ha permitido que la iniciativa se desarrolle ya en las tres provincias del Kurdistán iraquí. Y, desde la pasada temporada, los niños sirios que habitan un campamento de refugiado cercano también se deslizan por la nieve de Penjwin. "Cuando no hay esquí, la vida es bastante aburrida y dura", admite Igor, que suele vivir un par de meses al año en el pueblo y tiene aún mucho terreno por pisar. "Cuando no hay nieve, me paso el día tomando té y de casa en casa. Les digo que la cultura kurda está en los pequeños pueblos y que si se van a la ciudad la perderán. Hay que cambiar el 'chip' de la mayoría de los kurdos. Solo suben a la montaña para sentarse, comer, beber y bailar".
Esta adquisición estratégica se produce por la proximidad de las culturas y la similitud de los modelos de negocio de ambas empresas: enfoque ligero de activos, almacenes dedicados y soluciones adaptadas a las necesidades específicas de cada operación.
La compañía espera conseguir que el 25% del negocio provenga de EE.UU. y alcanzar una facturación de 300 millones de euros al cierre del año fiscal 2026.
El proceso de Li-Cycle permite recuperar hasta el 95% de la masa de una batería de iones de litio y utilizar los minerales críticos de estas baterías para fabricar otras nuevas.
La compañía ya colaboró en 2022 con esta asociación en la preparación de bolsas de productos de higiene personal para familias necesitadas, acción que realizó junto con su cliente Moët Hennessy.
El aumento de la compra online y los cambios en el comportamiento del consumidor durante los últimos años han llevado a una demanda sin precedentes de soluciones de almacenamiento y cumplimiento dentro del sector minorista.
La asociación fomentará la participación de los distribuidores de recambios en el encuentro y expondrá la contribución de los mismos a las nuevas tendencias de movilidad.
La compañía reconoce cinco pasos fundamentales para ayudar a lograrlo, y aseguran que es un compromiso a largo plazo y puede ser posible si trabajamos de forma conjunta.
La empresa ha multiplicado por más de cinco el número de palés gestionados bajo este sistema, la implantación del modelo pool permite reutilizar los soportes hasta diez años.
Es parte de la apuesta de la compañía por la circularidad, incluye un centro de recuperación y reciclaje de mobiliario y un área de I+D. Las instalaciones están avaladas por el certificado internacional BREEAM de sostenibilidad.
Comentarios