El pasado 10 de diciembre, agentes del Seprona, de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid, procedieron a la inmovilización de forma cautelar de 73 cachorros de perro en el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajaspor no cumplir la normativa europea sobre intercambio de animales vivos, ya que los animales no habían cumplido los tres meses de edad, lo que impide su transporte.
Los cachorros procedían Praga y su destino final era el sur de Madrid. Fuentes de la Guardia Civil aseguran que este método de actuación es utilizado de forma reiterada por redes organizadas, «que se aprovechan del desconocimiento que tienen las personas en los trámites y requisitos que deben cumplir los establecimientos y la procedencia de las mascotas, sobre todo en lo relacionado a edades, vacunas y documentación que debe acompañar a los animales».
Asimismo, explican que uno de los métodos más utilizados por estas redes es la expedición de una nueva cartilla sanitaria, por lo que el cliente desconoce el origen real del animal.
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