Entre julio y septiembre, se mantuvo en Europa el superávit de cargas en el transporte, a pesar de coincidir con los meses de vacaciones del verano. Con un 50,2% de cargas frente a un 49,8% de camiones, la ratio roza el nivel óptimo teórico.
Estos son algunos de los datos del barómetro del transporte de TimoCom, que, a pesar de los buenos resultados del tercer trimestres, también recoge «importantes fluctuaciones intermensuales». En cualquier caso, las cargas superaron la capacidad disponible en julio, una situación que no se producía desde 2011.
A finales del mes de agosto, no obstante, la tendencia cambió: la ratio de cargas y camiones se situó en 45:55. Así, la proporción de cargas cayó con más fuerza que en el mismo mes del año anterior (del 47% al 44% en 2014). En este sentido, el representante en jefe de TimoCom, Marcel Frings, explica: «Con seis puntos porcentuales, la proporción de cargas experimenta una caída desproporcionada entre julio y agosto. En años anteriores, solo se registró una caída de entre uno y tres puntos porcentuales en este periodo. Pero nos hemos percatado de un dato peculiar: los años con un superávit de cargas en julio registran una caída más pronunciada de cargas en agosto. En 2011, la caída fue de 12 puntos porcentuales, por ejemplo».
En septiembre, la oferta de cargas aumentó cuatro puntos porcentuales, pero «todavía no había tocado techo», explican desde TimoCom. Así, en el último trimestre del año se registró una relación de cargas y camiones de 55:45 en el barómetro de transporte de la compañía.
En su conjunto, el tercer trimestre arrojó un superávit —aunque pequeño— de cargas. Dos trimestres consecutivos de superávit de cargas no se producían desde hacía dos años. No obstante, Frings prevé que el último trimestre de 2015 nos deparará otra sorpresa: «Me parece muy interesante la cuestión de si la problemática actual de los refugiados tendrá un efecto en la economía y en el mercado del transporte. ¿Cómo afectarán los controles fronterizos el flujo de transporte? ¿Podrá la preocupación y la asistencia a los refugiados paralizar la política? Son preguntas que nos ocuparán las próximas semanas y meses».
A pesar de ello, «los pronósticos para el cuarto trimestre son positivos —continúa Frings—. Confío en que el inicio del “otoño dorado” traiga consigo un octubre generoso de cargas, en una situación comparable a la de 2013. En cuanto a noviembre, me atrevo a pronosticar que, después de mucho tiempo, los resultados volverán a situarse por encima del 50% en cargas, al igual de lo que ocurrió en julio».
La colaboración en este tipo de eventos resalta la importancia de la solidaridad y la responsabilidad social corporativa en la construcción de una sociedad más justa y equitativa.
Comentarios