IMP: Los empresarios de transporte de baja temperatura, contra la subida de los peajes

La Asociación Española de Empresarios de Transporte Bajo Temperatura Dirigida (Atfrie) ha manifestado en un comunicado su «más contundente oposición a la subida de los peajes de las autopistas que con nocturnidad y alevosía se produjo en el día de ayer».

El precio de los peajes se ha encarecido un 7,5% desde las 24 horas del ayer, domingo, 29 de julio, tras la supresión de la compensación que el Gobierno daba a las empresas concesionarias de autopistas, y que estas repercutirán a partir de ahora a quienes transitan por ellas.

Atfrie considera que «no es momento de subidas y mucho menos en el importe de las tarifas de las infraestructuras, algunas de las cuales, por su antigüedad, están ya más que amortizadas»

La asociación denuncia asimismo que las concesionarias no pueden pretender compensar sus pretendidos déficits con aumentos sistemáticos de peajes que además de incidir en los resultados del resto de los españoles, producen un efecto de desplazamiento de los hasta ahora usuarios de carreteras más seguras (autopistas y autovías), a las carreteras convencionales, lo que puede incidir directamente en el aumento brutal del número de víctimas de la carretera, al ser estas de doble circulación, y hacerlo en vísperas de las fechas con más desplazamientos del año. «De este posible aumento de la siniestralidad serán las concesionarias las que tendrán exclusiva responsabilidad, que no se atribuya este al transporte. Estimamos ilógica esta actitud cuando la excusa es que dichas autopistas tienen una utilización solo entre 30 y el 33%. A esto se podría añadir un desplazamiento masivo de vehículos de gran tonelaje a dichas carreteras convencionales, lo que sin duda aumentaría el riesgo en las mismas, por ser imposible soportar más aumentos de costes de explotación a las empresas».

Atfrie está convencida de que es el momento oportuno y necesario para la recuperación de las infraestructuras en favor de todos los españoles: «Estimamos que no se debiera retrasar la intervención de la Comisión Nacional de la Competencia ante la evidencia de que se ha producido un acuerdo de fijación de tarifas y de monopolio con concentración de la oferta, lo que produce la indefensión total del sector al que representa, por no existir competencia alguna ni alternativa».