La compañía Atox ha renovado su adhesión al pacto mundial de Naciones Unidas, una iniciativa cuyo objetivo es promover los derechos humanos y las normas laborales, proteger el medioambiente y luchar contra la corrupción.
Las empresas que se suman a este pacto deben explicar cada año las novedades que han implantado para aplicar estos principios con la publicación de un Informe de progreso en el que se especifiquen las iniciativas puestas en marcha y a quiénes afecta: sindicatos, accionistas, medios de comunicación, Gobiernos, consumidores, etc.
Atox, que se adhirió a este programa en octubre de 2012, renovó su compromiso el pasado año y ha emitido ya su primer informe.
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