Desde el pasado domingo 15 de noviembre, el Gobierno de la Federación Rusa ha puesto en marcha su propio sistema de cobro de peaje obligatorio para todos los camiones nacionales y extranjeros de más de 12 toneladas de MMAque circulen por la red de autovías rusas.
Se calcula que el nuevo impuesto, tal y como informan desde Fenadismer, afectará a más de dos millones de vehículos. Para su seguimiento, se han instalado 481 pórticos de seguimiento a lo largo de los 50.774 kilómetros de extensión de las autovías rusas y se ha dotado de una flota de patrullaje móvil compuesto por cien vehículos.
El objetivo de la medida, según el Gobierno ruso, es recaudar fondos públicos para el mantenimiento y mejora de la red federal de autovías. El precio del peaje se ha establecido en 3,73 rublos rusos por kilómetro (en torno a 5 céntimos de euro), que puede abonarse por Internet (mediante pago por adelantado del trayecto a realizar) o mediante la instalación de un dispositivo OBU a bordo del camión.
Entre las principales causas que motivan el auge se encuentran la necesaria transformación hacia la sostenibilidad del packaging, la automatización y digitalización de la industria, la recuperación económica pospandémica de los diferentes sectores productivos, y el imparable crecimiento del comercio electrónico que lleva asociado nuevas necesidades de packaging y logística.
Aprovechando los datos de su propia flota, los clientes pueden evaluar si están preparados para la electrificación, calcular el coste total de propiedad (TCO) de la electrificación, el coste operativo y el ahorro de CO2.
Comentarios