La factura eléctrica de una empresa dedicada al almacenamiento frigorífico representaba en torno al 40% de su cuenta de resultados, según Julián Corriá, presidente de Aldefe (Asociación Española de Explotaciones frigoríficas, logística y distribución de España), que se entrevistó con el presidente de CEOE, Antonio Garamendi. “Hemos de llamar la atención del nuevo Gobierno sobre la urgente necesidad del control de precios en materia de energía, que ha experimentado un crecimiento acumulado del 44,4% en el periodo 2016-2018 y la minoración en las tasas e impuestos que debemos pagar, de forma que podamos subsistir como empresas de servicios frigoríficos”, explicó Corriá.
El presidente de Aldefe, señala que “la fiscalidad ligada a la energía es altísima y estamos excluidos por CNAE de las ayudas en bonificación del Impuesto Eléctrico; además no conseguimos ayudas a la eficiencia energética de forma directa porque la Administración no nos considera industria, cuando transportamos y almacenamos cada día miles de toneladas de alimentos y otros productos perecederos, que son vitales para el bienestar ciudadano”.
El sector que tiene una capacidad frigorífica total de 6.000.000 de m3; factura anualmente 200 millones de euros y mantiene el empleo de 13.000 personas, en un centenar largo de empresas. Los túneles de congelación alcanzan unas 1.200 Tm/24 horas y la producción de hielo, tanto tradicional como en cubitos o escamas se cifra en torno a las 1.500 toneladas al día.
Según un estudio de Packlink, el 32,7% de los encuestados desea que este avance tecnológico agilice la gestión de devoluciones y un 29,6% quiere que se use para facilitar los pagos seguros y cómodos.
Destaca el descenso en el transporte internacional (-19,3%), los datos son levemente positivos en el transporte nacional de corta distancia (+1,5%), y en transporte nacional de larga distancia (+0,7%)
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