Se estima que la instalación fotovoltaica brindará a Cronofrio una solución eficaz para mitigar los elevados costes eléctricos asociados a su actividad de logística en temperatura controlada en el sector alimentario.
El activo contará con un almacén de 32.000 m2 y unas oficinas de 1.250 m2. La nave tendrá una altura libre de 11,5 metros, iluminación LED y una instalación fotovoltaica con una potencia de 310 KW.
Una de las instalaciones se encuentra en el PTL-Noblejas (Toledo), y el segundo en Chiloeches, al noreste de Madrid. Ambos se encuentran en fase de construcción.
Destacan el alquiler de 14.348 m2 propiedad de GLP al operador logístico De Rijke en Santa Perpetua de Mogoda (2ª corona), así como los 7.130 m2 del proyecto last mile propiedad de Prologis.
Destaca Sant Boi DC7, un proyecto de gran peso con el que refleja su apuesta por la reconversión de espacios en una zona donde la disponibilidad de suelo logístico es prácticamente nula.
Se trata de un mapa interactivo elaborado por un equipo multidisciplinar, que ha permitido recopilar información sobre 23,9 millones de metros cuadrados en la zona centro y Cataluña, repartidos entre 1.298 naves logísticas.
En los próximos meses está previsto que se incorporen al stock un total de 560.158 m2 de naves logísticas que están actualmente en construcción a riesgo, llave en mano y autopromoción.
La compañía aumentará su capacidad de almacenaje en más de un 40%, pasando de 9.000 a 13.000 ubicaciones. Además, reforzará su plantilla con perfiles polivalentes y comerciales, así como especialistas en almacenaje y transporte.
El nuevo parque cuenta con una superficie alquilable de 22.637 m2, repartidos en dos edificios, aptos para actividades de tipo logístico e industrial. Se prevé que el primer edificio esté listo para entregar en julio.
Su objetivo superar el millón de m2 en el país en 2024-2025. Para ello, impulsará su crecimiento mediante la compra de suelo, la promoción de nuevos proyectos, tanto llave en mano como a riesgo, y en la compra de inmuebles ya construidos.
Se ha desplazado así a los activos industriales y logísticos al tercer puesto del ranking de activos inmobiliarios preferidos para la inversión. En Madrid, Barcelona y Valencia, la contratación de estos activos retrocedió un 36% respecto al año 2022.