Bergé refuerza su servicio de transporte por carretera en Galicia
Bergé ha ampliado su flota de camiones para reforzar el servicio de transporte de mercancía desde los puertos gallegos a almacenes y centros de producción de la región o de otras comunidades próximas como Asturias y Castilla -León o el norte de Portugal.
“Los puertos del norte de España son los que más graneles sólidos reciben al año y en torno a un 25% de éstos, se gestionan en la comunidad gallega. Para atender a esta demanda en la zona, Bergé ofrece los servicios de consignación, estiba y transporte (operando más de 500.000 toneladas/año en todas sus actividades) y almacenamiento de más de 60.000 toneladas en sus propios almacenes. Con la intención de seguir mejorando en el área de transporte, hemos adquirido tres nuevas unidades de camiones del modelo R de Scania, que se dedicarán principalmente al transporte de graneles industriales sólidos, como el carbón o el coque, y de graneles agroalimentarios, desde los puertos gallegos hasta los almacenes, centros de producción o logísticos de los clientes”, aseguran desde la compañía.
Durante este último año, la compañía ha incrementado su flota de camiones en más de un 20%, en toda España. Con esta nueva ampliación, la compañía dispone ya de una flota de unos 40 camiones para ofrecer distintos servicios de transporte.
Las nuevas unidades se unen así a las actuales permitiendo a la delegación de A Coruña disponer de una flota de 12 camiones, de hasta 40 toneladas, para la prestación de sus servicios diarios.
La apuesta de Bergé por el transporte terrestre se está desarrollando en aquellas delegaciones donde este servicio tiene un papel protagonista. Así, además de A Coruña también destaca este refuerzo en Cartagena, con la adquisición de cinco nuevos camiones de la marca Volvo.
El objetivo de Bergé es impulsar su presencia como operador logístico integral y ofrecer al cliente el mejor servicio desde origen hasta destino. Con esta finalidad, ha decidido potenciar su oferta de servicio de transporte terrestre (entre otros aspectos) e integrarse en toda la cadena logística.
El sector del frío en Europa presenta sus demandas a los europarlamentarios ante la próxima convocatoria electoral, reclaman que las empresas deben ser consultadas cuando se prevean cambios en las políticas europeas; deben recibir apoyo e incentivos para estimular la inversión y los plazos de implementación de las medidas deben ser realistas.
Son seis proyectos empresariales con participación española y de otros países de la UE que han recibido un total de 102 millones de euros para incrementar las estaciones de recarga y repostaje de combustibles alternativos de bajas emisiones.
Esta iniciativa de capital español surge tras un estudio de las condiciones del segmento de tráficos y de las demandas de los operadores, y tiene como objetivo proporcionar más rentabilidad a las empresas transportistas.
Esta ampliación de la flota de furgonetas eléctricas, junto con el rediseño de rutas, la optimización de entregas y otras iniciativas de reparto de envíos urgentes con cero emisiones, le permitirán reducir un 5% las emisiones de CO2 este año en España.
Se utilizarán materiales de alta calidad y contará con espacios verdes, áreas de descanso, estacionamiento y medidas de seguridad las 24 horas, tanto en el perímetro interior como exterior.
Dispone de productos que ofrecen unos altos resultados a sus clientes que cuentan con un equipamiento de vanguardia y con unas características novedosas que les permiten impulsar la eficiencia que necesita el proceso logístico.
Cuenta con más de 1.700 estaciones de servicio en su red internacional, presente en 11 países de Europa. En 2020 abrió sus primeras estaciones en Polonia y el año pasado, incorporó Rumanía a su red.
Los requisitos se han endurecido, mientras que en la anterior convocatoria bastaba con obtener un resultado global por encima del 70%, ahora es imprescindible superar unos umbrales mínimos en cada una de las áreas analizadas.
Destaca Sant Boi DC7, un proyecto de gran peso con el que refleja su apuesta por la reconversión de espacios en una zona donde la disponibilidad de suelo logístico es prácticamente nula.
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